Los aliados del presidente de México en la Cámara de Diputados buscan aprobar, antes de que finalice la Semana Santa, una polémica reforma c...
Los aliados del presidente de México en la Cámara de Diputados buscan aprobar, antes de que finalice la Semana Santa, una polémica reforma constitucional que daría al Estado mayor control del sector eléctrico, informó el jueves el coordinador del oficialista Morena en la cámara baja.
Ignacio Mier, jefe de la bancada de Morena en la Cámara de Diputados, aseguró que la próxima semana comienzan los trabajos formales para dictaminar la iniciativa enviada por el presidente Andrés Manuel López Obrador en octubre de 2021.
Posteriormente, el 11 de abril, la propuesta -que sufrirá cambios- será discutida en las comisiones de Energía y Puntos Constitucionales de la cámara baja. Un día más tarde, la decisión será votada y el 13 de abril se someterá a debate en el pleno de la Cámara de Diputados.
En febrero, el presidente de la Comisión de Energía de la Cámara de Diputados, Manuel Rodríguez, dijo en una entrevista con Reuters que Morena quería aprobar la reforma, con algunos ajustes, antes de que finalice abril, pero que aún no tenía los dos tercios de votos necesarios para hacerlo.
La reforma pretende poner al sector eléctrico en manos de la estatal Comisión Federal de Electricidad (CFE), así como desaparecer los órganos reguladores, eliminar permisos y garantizar el dominio de la nación sobre las codiciadas reservas de litio.
Líderes empresariales y funcionarios extranjeros, incluidos de Estados Unidos, han expresado su preocupación de que el proyecto de decreto pueda disuadir la inversión privada y desencadenar disputas legales internacionales.
El gobernante Movimiento Regeneración Nacional (Morena) y sus aliados del Partido Verde y el Partido del Trabajo (PT) tienen 280 curules en la cámara baja, pero para aprobar la iniciativa -que implica un cambio a la carta magna- necesitan 53 votos adicionales.
De aprobarse por los diputados, la reforma será enviada el 14 de abril al Senado, donde Morena necesita 15 votos adicionales para alcanzar los dos tercios. Si avanzara, la norma finalmente debe ser avalada por la mayoría de los 32 congresos locales, dominados ampliamente por Morena.
